Con su prisa y su calma, su ruido y su silencio, su noche y su día.
Repleta de contradicciones que complacen todos tus sentidos. Madrid es esa ciudad de la que no puedes despedirte porque sabes que una parte de ti siempre seguirá en ella.
Caminar por Chamberí es hacerlo por la historia de la capital.
Pocos barrios pueden presumir de tener tantos reclamos en tan poco espacio. Rico en cultura, ocio y gastronomía, Chamberí lleva implícito en su ambiente el secreto del saber vivir. Un paseo envuelto por ese aire castizo y hedonista que lo hace tan auténtico.
Interrumpida por mil rincones llenos de vida, se trata de una zona cosmopolita y romántica cuya personalidad se alimenta de los bares, parques, plazas, museos y edificios de renombre que la rodean.